Septiembre

Este barco no anda… Fueron esas las palabras que llegaron a la memoria una vez supe del fallecimiento del escritor, fue ese el sabor del concho -como diría el amado- que se que quedó en la garganta como recuerdo de los últimos días con el primer amor. Sigue leyendo «Septiembre»

6

1.

La muerte.

Ella está ahí, siempre está ahí, la posibilidad de morir, por cualquier razón, o por cualquier sinrazón, por el simple hecho de respirar y morir un poco a cada latido.

La diferencia, el punto de no retorno sobre la percepción de la muerte está en qué tan cerca llegas a sentirla, algunos cuando se acerca terminan buscándola, otros se aferran más a la vida… No creo que alguien siga caminando indiferente luego de sentirla ahí, casi palpable.

A veces resulta que estamos tan acostumbrados y vemos tan natural el estar vivos que se nos olvida que somos si acaso un suspiro en la historia del universo.

2.

La crítica. Sigue leyendo «6»

Lamento en bossa nova

Um dia você veio em branco,

você com flores, eles tentaram, em vão,

superar a sua beleza.

Mas você não veio, transitabas simplesmente.

E então, depois, você veio, sim, em minha vida …

Como entender isso?

Eu deslumbraste.

Seus lábios trouxeram o frescor do mar,

o mesmo que uma tarde você depositou em minha boca …

Como entender isso?

Agora você vai, só assim,

lembrando que tudo é efêmero.

Como aceitar isso?

.

Como o dia segue a noite,

Espero seu retorno.

.

.

Acefalia.

Se congelan mis palabras ante el miedo,

de las ganas, que hacer realidad no puedo,

el beso al cual no me atrevo. Un susurro.

Temo a las ondas que dibujan tu cuerpo,

temo a las olas que de mar lo perfuman,

envidio al sol que con sus rayos lo toca.

Te regalo mis manos para secar tus lágrimas,

te regalo el espejo de mis ojos,

el arcoiris de mi retina.

No te regalo, musa hermosa, mi memoria,

lugar que puedes habitar a ratos.

Más, te regalo mis palabras sin filtro.

No te regalo la luna, que te envidia

(quiere igualar el esplendor de tu risa),

más, te comparto mis delirios piantaos.

No te amo, no quiero amarte, no puedo…

Más te sueño, te pienso y te deseo…

Febrilmente te llamo y no respondes.

Temo al no, probable, de tus labios.

Pero el alma se alegra al evocarte.

Mil sonrisas sinceras te regalo.

Te regalo el abrigo de mis brazos,

Tuyos son mis latidos que aceleras.

Mi «quiero verte de nuevo» te comparto.

.

(Y no te regalo poesía, porque poesía sos vos).

.