Todo empezó como suelen empezar las protestas en la Universidad de Antioquia, una concentración de estudiantes en la plazoleta Barrientos, una que otra «papa bomba», inicialmente esporádicas, y de repente, a eso de la 1:30pm, con más frecuencia, lo cuál propició el ingreso de agentes del escuadrón antidisturbios de la policía (ESMAD), quienes tienen permitido el ingreso a las universidades públicas desde el gobierno de el ex-presidente Álvaro Uribe (y en particular, en nuestro departamento, con el apoyo del actual gobernador, Luis Alfredo Ramos, actualmente investigado por parapolítica). Sigue leyendo «ESMAD violando DIH? UdeA»→
Asombro, esa fue mi primera reacción cuando al ver el noticiero supe que en Chigorodó estaban desalojando por la fuerza aproximadamente 5400 personas que estaban «invadiendo» predios privados en Chigorodó, Apartadó y Carepa (Antioquia-Colombia).
La presentadora del noticiero, que probablemente dormirá en una cama doble con su marido, bajo un buen techo y un hogar con los lujos que da pertenecer a la clase media-alta del país, los muestra como unos «encapuchados que atacaron con papas bomba a los agentes del ESMAD», y esta claro que ser encapuchado en este país es algo que ya esta bien estigmatizado… Pero las imágenes muestran lo contrario: yo no veo a unos campesinos (que en el noticiero tachan de «supuestos campesinos») que se fueron a buscar al ESMAD para atacarlos, veo unos agentes del ESMAD lanzando gases y destruyendo las casas de miles de personas pobres, ó mejor dicho, sus tugurios, sus albergues provisionales (además en una temporada invernal que parece extenderse hasta julio). Sigue leyendo «Y ahora, ¿quién podrá defenderlos? (Urabá)»→
Ramos, hace ya un buen tiempo decidió permitir el ingreso del ESMAD (escuadrón móvil anti disturbios) a la universidad, así como ocurrió el famoso 15 de septiembre (15s), dónde se libró una «batalla campal» entre estudiantes y esmad en el bloque administrativo. Sigue leyendo «UdeA: ¿Hasta cuando?»→
Es lamentable la situación a la cuál se ha llegado. Hace pocos meses, el desprestigio sistemático por parte de los medios de comunicación hacia la institución pública universitaria que cuenta con más de 200 años de historia se empezó a hacer más fuerte.
El pan de cada día fueron artículos en periódicos como El Colombiano, El Mundo, Semana entre otros, además de parcializadas notas en los noticieros, el motivo: «La terrible situación de seguridad al interior de la Universidad de Antioquia». Sigue leyendo «Luto universitario (UdeA)»→
Ayer, 11 de febrero de 2008 era el segundo día de la conmemoración por la muerte de estudiantes universitarios un día de “disturbios” (un 10 de febrero), Antes de las 11 sonó la primera papa explosiva –creo que fue la primera- por los lados del teatro al aire libre, justo al lado de el lugar en el que me encontraba estudiando.
Antes de las 2pm continuaron las papas, para ese entonces, yo me encontraba en un laboratorio, permanecimos allí hasta que el amigo monitor nos dijo que debíamos salir antes de que nos sacaran…
Salgo y observo a un montón de gente cantando y saltando, los del escuadrón anti-motines ya estaban preparados… esos mismos señores que yo había visto durmiendo apaciblemente antes de dirigirme hacia Caldas unos días antes.
La gran mayoría eran niñas que querían ver el espectáculo, tal vez igual que yo, solo que con diferentes fines. Camino en busca de alguien conocido, me encuentro con el chico que siempre va a las asambleas y nos hace aplazar los parciales durante los siguientes días, le alzo las cejas y sigo, me detengo a observar, todo esta muy bien organizado, canecas para retener adentro los gases lacrimógenos, dos tipos con el logo de derechos humanos y la personería me hacen confirmar dicha idea…
Hoy no se van a entrar, pienso, hoy están los de derechos humanos, no pueden entrarse a tirarle gases a la gente… Qué errada estaba, me encuentro a una gran amiga, caminamos, hablamos, por el momento todo normal, no huele a gas, llega el novio de ella, seguimos caminando, yo quería ver si se entraban, luego, caminando, me encuentro con una extraña sorpresa:
Los señores que acostumbran vender panzerottis afuera de la universidad, al igual que otros vendedores, entraron a la universidad para cuidar de sus bienes, naturalmente, era un carrito de venta callejera como cualquier otro… CON UNA PIPETA DE GAS, ellos deciden seguir vendiendo dentro de la universidad, los clientes se acercan, yo inevitablemente recuerdo el suceso de “la pipeta incautada en la U de A” tal vez tomáz si tenía razón, tal vez la dichosa pipeta era una como estas, de un señor que va todos los días a la universidad para vender algo, y que, en medio del susto, ingresa a la universidad buscando protección, ¿no les parece curioso que prefiera quedarse en la universidad que de lado de los anti-motines?
Paint it blue! 